Cómo leer su lenguaje corporal y entender lo que está sintiendo 🐶🧠👀

Tu perro te habla todo el tiempo.
No con palabras, pero sí con el cuerpo, la mirada, la postura, la cola, las orejas.
Y cuanto mejor leas ese lenguaje, mejor vas a poder acompañarlo, prevenir problemas y fortalecer el vínculo.

En este blog te contamos las señales más comunes que dan los perros para comunicarse, cómo reconocerlas y por qué prestarles atención puede cambiar por completo la convivencia.

Los perros no hablan... pero comunican todo

A diferencia de los humanos, los perros no disimulan tanto.
Lo que sienten, lo expresan. A veces de forma sutil, y otras veces muy evidente.

El problema es que, si no conocemos su lenguaje, podemos malinterpretar lo que está pasando:
Pensamos que está “contento” cuando está estresado.
O creemos que “se porta mal” cuando en realidad está tratando de pedir ayuda.

Aprender a leer el lenguaje corporal es como aprender un nuevo idioma… pero uno que tu perro ya viene usando desde siempre.

¿Qué son las señales de calma?

Son gestos y posturas que usan los perros para autorregularse o calmar a otros.
No significan que el perro está relajado, sino que está tratando de mantener o recuperar la calma frente a algo que lo estresa o incomoda.

👅 Lamerse el hocico

Muy rápido y sutil. Lo hacen ante incomodidad, tensión o para evitar conflicto.

🙈 Girar la cabeza o apartar la mirada

Una forma de decir “no quiero problema”, “estoy incómodo” o “necesito espacio”.

🐾 Bostezar (cuando no tiene sueño)

Sí, el bostezo también es una señal de calma si aparece en momentos de tensión o interacción social.

🐕 Sacudirse

Como si se estuvieran secando, pero sin estar mojados. Es una forma de “resetear” después de algo intenso.

🧍 Caminar lento o moverse en cámara lenta

Cuando un perro siente presión, muchas veces baja el ritmo para suavizar el momento.

Estas señales no son malas: son una gran herramienta que tienen para evitar conflictos. Pero si aparecen todo el tiempo, es señal de que algo no anda bien.

Señales de estrés o incomodidad

No siempre son fáciles de ver, pero conocerlas te permite actuar antes de que el perro explote:

• Jadeo excesivo sin calor ni ejercicio

• Pupilas dilatadas

• Rigidez corporal

• Cola baja o entre las patas

• Orejas hacia atrás

• Vocalizaciones (llanto, gruñido, ladrido agudo)

• Hiperactividad repentina

• Evitación (querer irse, esconderse)

Señales de bienestar y relajación

Por suerte, también hay muchas formas de ver cuando un perro está cómodo y feliz:

• Cuerpo suelto y postura relajada

• Cola que se mueve a ritmo medio (no acelerada ni rígida)

• Orejas en posición natural

• Boca entreabierta, lengua afuera (cuando no hace calor)

• Se acerca por iniciativa propia

• Ojos suaves, sin tensión en cejas ni párpados

Un perro relajado no está quieto como estatua. Está activo pero tranquilo, atento pero confiado.

¿Por qué esto cambia la convivencia?

Porque muchas veces los conflictos o los “problemas de conducta” no son más que intentos fallidos de comunicación.

Un perro que gruñe está diciendo “necesito espacio”, pero si no escuchamos ese mensaje… la próxima vez quizás muerda.

Un perro que salta desesperado puede estar pidiendo contención, no castigo.

Escuchar el cuerpo es la mejor forma de prevenir, acompañar y educar.

En Cooper creemos que leer el cuerpo es clave

Por eso trabajamos con cuidadores, paseadores y entrenadores que saben leer el lenguaje de cada perro.
No para “corregir” conductas, sino para entender qué las genera.

Porque un perro que se siente leído es un perro que confía.
Y un perro que confía… aprende mejor, se relaja más y disfruta cada experiencia.

En resumen 🐾

Tu perro no te habla con palabras, pero te dice todo.
Aprender a leer su cuerpo no solo te ayuda a entenderlo mejor, sino que te permite cuidarlo con más empatía, respeto y claridad.

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Y si querés seguir aprendiendo sobre comunicación canina y vínculo, pasá por nuestro blog en blog.somoscooper.com. 🐶📘